Algún tiempo atrás tuve la oportunidad de realizar un viaje al estado de Guanajuato, en México, llevándome una grata sorpresa. No por la famosa y antañona ciudad de Guanajuato, la cual no necesita presentaciones adicionales, sino más bien por haber conocido la ciudad de Irapuato, tierra de fresas y haber admirado los paisajes de Pénjamo, tierra de téquila, sierras agrestes y paisajes rancheros.
El Estado de Guanajuato es quizá uno de los estados mexicanos con mayor densidad de lugares históricos en ese país, los cuales han aportado no solamente historia, sino que su cultura, gastronomía, tradiciones son las que han traspasado fronteras de tal forma que son consideradas parte de la imagen de todo el país en el exterior.
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Recientemente realicé un viaje de trabajo a México D.F con los mismos temores y prudencias que por muchos años han tenido los viajeros que visitan la antigua gran ciudad de Tenochtitlán y hoy capital de la gran república mexicana. Temores de historias pasadas de violencia, asaltos y peligros en cada esquina.
Pero el D.F en esta ocasión me presentó otro rostro. Un rostro lavado y pintado con flores, calles ornamentadas y bastante limpias, arte de la calle, esculturas y espacios públicos renovados, así como policías amables e informativos con el turista. Una ciudad más segura, que según sus habitantes, es actualmente la ciudad más segura del país. Con una agenda cultural intensa, actividades ciudadanas constantes, con medios de transporte novedosos como las ecobicis, el metrobus, los taxis rosados, las ciclovías, calles peatonales y muchos proyectos nuevos que la han convertido en una ciudad mucho más caminable o visitable de lo que solía ser. Caminar por Avenida Reforma a las 11 de la noche ya no significa un peligro, ni siquiera caminar hasta el Zócalo es un problema. Seguramente siempre hay sitios a los cuales es mejor evitar y ladronzuelos oportunistas. Seguramente hay muchos problemas de tráfico, contaminación y huelgas eternas, pero esa gran urbe de más de 22 millones de habitantes se abre poco a poco nuevamente al mundo con un rostro suavizado, con una vigilancia constante y una invitación coqueta para que la visiten nuevamente.
San Francisco. Una ciudad que se desborda sobre el pacífico desparramándose por varias colinas, llenas de colores, olores y sabores. Una ciudad del mundo. Liberal y libertina. Abierta a las ideas de todos, pero muy arraigada a sus ideales.
Una ciudad con poco tiempo de existencia, pero con una historia tan intensa que pareciera más antigua de lo que es. Vital y revitalizante. Bohemia y progresiva. San Francisco es definitivamente un crisol donde distintos elementos se mezclan para formar uno de los sitios más alucinantes de los Estados Unidos. Cualquier idea que de la ciudad tenga quien llega por primera vez es poca cosa comparada al encanto particular y a la magia que descubrirá en esta ciudad, joya del pacífico. Famosa por el puente Golden Gate y sus casas victorianas pintadas de alegres colores la ciudad ofrece una diversidad increíble donde cada barrio es diferente. En cada sector de la ciudad hay edificios, monumentos o cosas particulares que valen la pena ser conocidas. San Francisco una ciudad que vive apasionada su amor al mar, a su bahía, a sus colinas. Una ciudad apasionada por la comida, por los vinos de sus viñedos cercanos. Apasionada por las culturas diferentes que la habitan, por la libertad y derechos de las personas, apasionada por la vida. La pasión por la vida, por el saber vivir se puede sentir en cada esquina de esta vibrante urbe que día a día nace al mundo para demostrar que la convivencia entre pueblos es posible. Aunque de clima templado y siempre acariciada por los vientos del océano, sus casitas victorianas de madera y muchos detalles antiguos aun visibles en la ciudad ofrecen una bienvenida cálida. El Barrio Chino, los muelles, la zona de Twin Peaks, el parque estatal, el viejo faro son tan solo algunos de los sitios que son una obligación en un viaje a San Francisco. Así mismo el barrio Italiano o “Little Italy” y la plaza Jackson Square. San Francisco en pocas palabras: pasión, libertad, belleza, color, sabor, vida... Ya están saliendo en los medios de comunicación los resultados de los premios de Trip Advisor 2013 y muchos clientes, amigos y lectores me han preguntado en varias ocasiones que pienso de esos premios. Y bueno, pienso lo mismo que lo que pienso de TripAdvisor en general a la que considero una fuente para obtener información interesante y ya.
Lo de los premios es subjetivo y jamás recomendaría a alguien que se guiara por esos premios para tomar su decisión de reserva. Para los posicionamientos de TripAdvisor se consideran entre varios aspectos los comentarios de usuarios (a veces amigos, habitantes vecinos, contactos, etc.) y esto es muy subjetivo, además que se presta para, bueno, ya sabemos, "muchas cosas". Un claro ejemplo es que quizá alguien posea en verdad el mejor hotel boutique en un país, pero su ciudad es menos visitada que la ciudad de otro hotel de menor calidad a donde llega el doble de turistas, los cuales opinan en Trip Advisor y bueno, simple matemáticas el hotel más visitado y comentado de esa ciudad resulta ganador de un país sobre otros de mejor calidad. O ¿Qué pasa si un B&B (Bed and Breakfast) es manejado por unos cariñosos abuelos con calidad insuperable y tradición hotelera, pero que no son expertos en tecnologías y redes sociales, y el B&B de la competencia es una joven novata, pero dinámica que junto con sus amigos pasan todo el día viendo como elevar sus ratings? Sucede lo mismo en todas las votaciones online. ¿Acaso no era igual antes con los reinados infantiles en las escuelas? La niña que conseguía más dinero colectado para alguna obra o proyecto de su escuela y no siempre la más bonita era la que ganaba! Mi consejo: lea su amado trip advisor, analice la información y el origen de la misma, consulte otras fuentes, compare y haga sus propias conclusiones, pero olvídese de los premios, estos no son una referencia segura para su toma de decisión. Honduras tiene destinos famosos como las Islas de la Bahía y sus arrecifes; la Costa Caribe de Tela por sus playas; las Ruinas de Copan por el pasado maya y varios parques nacionales llenos de vegetación exuberante como Cerro Azul Meámbar en la zona de Lago de Yojoa y Pico Bonito en La Ceiba.
Pero en sus montañas de tierra adentro Honduras esconde centenares de pueblitos antañones, recuerdos de épocas pasadas cuando la mayoría de los hondureños vivían en capsulas montañesas y envueltos en sus propios mundos. Pueblos fundados por españoles, franceses, italianos y otros europeos enviados por los reyes de España para poblar las Américas. Fundadores que terminaron mezclándose con las mujeres nativas dándose así, el sincretismo cultural y racial del mestizaje que constituye la gran mayoría de la hondureñidad. De esta manera en cada valle atrapado entre montañas, en cada apartado cerro en la lejanía podemos encontrar palabras, comidas, leyendas, tradiciones y rostros distintos, con "ingredientes" americanos y europeos. Así hoy en día "pueblear" o visitar esos pueblitos pintorescos es digno motivo de recorrer Honduras en automóvil y disfrutar de paisajes espectaculares que cambian a cada vuelta de carretera. Pueblos con costumbres propias, curiosidades arquitectónicas, historias humanas surrealistas y encantos naturales desconocidos por la mayoría. Honduras cuenta con una amplia red vial, en su mayoría en condiciones suficientes para escaparse los fines de semana y conocer esos rincones atrapados en los departamentos del interior como Santa Bárbara, Copan, Ocotepeque, Intibuca, Lempira, La Paz, Comayagua, El Paraíso y Olancho. Las Ruinas mayas de Copán. Patrimonio Mundial de la Humanidad. Mezcla de París y Atenas del Mundo Maya. Centro ceremonial, científico y político.
Copán cuenta entre su inmensurable cantidad de estructuras y piezas interesantes con la escalinata de jeroglíficos más grande del mundo maya; las mejores y más bellas esculturas mayas; el mejor museo de esculturas mayas in situ y el campo de pelota más bello y artístico de Meso América, entre otros. Para comprender parte de la cultura que habitó el valle de Copán se hace necesario visitar varios sitios, entre ellos: el recinto monumental del parque, el sitio llamado “Las Sepulturas” un complejo habitacional donde habitaba la jerarquía, el Museo de Esculturas, hogar de piezas originales que han sido colocadas bajo techo para su preservación de los voraces elementos y el Museo del Pueblo, lugar donde el visitante podrá observar artefactos de uso diario, joyas y restos humanos, entre otros. Además de aprender sobre la cultura maya quien visite Copán Ruinas podrá realizar otras Actividades como por ejemplo: paseos a caballo por entre antiguas fincas de café o deslizamientos entre las copas de los árboles en el Canopy Los Sapos. La naturaleza rodea Copán y sus sonidos, colores y arrullos pueden disfrutarse en el Luna Jaguar Spa y en el Parque de Aves Macaw Mountain. En el parque de aves el visitante podrá encontrarse con hermosos ejemplares de guacamayas, loros, pericos, tucanes, búhos y gavilanes endémicos del continente americano. Esto y mucho más hace de un viaje a Copán una gran experiencia… Un asiento en Primera fila...ante el show del Mar Caribe...en la Isla de Guanaja, Honduras... Honduras Central Station Travel and Tours puede ayudarte a llegar a Guanaja, el tesoro caribeño escondido en Honduras...así como a muchos destinos más... Solicita más información a: [email protected] "Un viaje de mil millas comienza con el primer paso." Lao-tsé |
AutorEn el blog de viajes de Henning Kretschmer, podrá encontrar reportajes, comentarios o breves notas del Experto en comunicación turística y Travel Journalist, editor de la revista digital revistavivirdeviaje.com Archives
August 2017
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